PERFILES

Así recordó María del Pilar Menéndez, su paso por la Asociación Española que le permitió a su vez  participar en la organización de la Fiesta del Inmigrante, como integrante de la Colectividad Española. Hoy con 87 años, colabora con la festividad desde afuera y recuerda con nostalgia a sus padres que llegaron desde España para forjar un futuro mejor en nuestro país.

El Día del Inmigrante en la Argentina, se celebra el 4 de septiembre de cada año desde que se lo estableció mediante el Decreto Nº 21.430 del año 1949, siendo presidente Juan Domingo Perón. Se eligió esa fecha para recordar la llegada de los inmigrantes al país en recuerdo de la disposición dictada por el Primer Triunvirato en esa fecha de 1812, que ofreciera “su inmediata protección a los individuos de todas las naciones y a sus familias que deseen fijar su domicilio en el territorio”.

En ese marco y desde hace 40 años, Club Rotario y diferentes colectividades llevaron adelante una nueva edición de la Fiesta Anual del Inmigrante. Las actividades se concentraron en la jornada del sábado. Por la mañana, en el Monumento a los Inmigrantes se desarrolló el acto central, y por la noche, la tradicional Cantina con danzas y platos típicos, además de la elección de la Reina de la Colectividad.

La Colectividad Española es una de las colectividades que participa activamente de este festejo. María del Pilar Menéndez, conocida popularmente como “Maruja” hace muchísimos años a la Asociación Española y poco tiempo después comenzó a trabajar en la organización de la Fiesta del Inmigrante.

“Maruja” hija de inmigrantes españoles recuerda con nostalgia a sus padres que llegaron desde Asturias para radicarse en Argentina para trabajar y así huir de triste situación que atravesaba su país natal. En Perfiles de este domingo, María del Pilar destaca la importancia de conservar las costumbres de cada país, las comidas típicas y todo lo que recuerde a aquellos inmigrantes que escaparon de una realidad cruel para vivir en un país que en aquellos tiempos era el sitio ideal para forjar un presente y futuro mejor.

-¿Tus padres vinieron desde Asturias y se radicaron en nuestro país?

Mis papás eran españoles, vinieron de Asturias, antes de 1920 y se instalaron en Krabbe. Ahí vivieron siempre, primero mi papá y después mi mamá, que estuvo en Buenos Aires unos años. Ella vino a Pringles a pasear de casualidad, lo conoció a mi papá y se casaron. Los dos eran asturianos, vinieron sin ningún contacto con nadie, a trabajar directamente. Se bajaron del barco- en ese tiempo eran tres meses de viaje- y llegaron directo a trabajar. La única ventaja es que llegabas a Buenos Aires y había trabajo, pero a mi papá no le gustó mucho y un día un señor del campo que estaba en el mismo hotel donde él trabajaba, le ofreció venirse  a Pringles. Desde ahí, toda su vida hasta los 94 años que vivió, estuvo muy contento de estar en Argentina. Primero trabajó de empleado y después se independizó formalmente.

-¿Tus papás tuvieron muchos hijos?

No, soy hija única. Me quedé en el campo hasta que fui al secundario y después me vine a Pringles.  Mis padres siempre se acordaron mucho de España, estaban continuamente en contacto con muchos amigos y compañeros, porque en ese tiempo había gran cantidad de extranjeros. Era algo muy tradicional venir a las romerías españolas. A mi quedaron las costumbres, las comidas de España, todo.

-¿Qué comida típica hacia tu mamá? 

Mi mamá hacia mucho risotto y era muy buena cocinando, en un principio cuando vino a Buenos Aires trabajó de cocinera. En esa época toda la gente ambulante que andaba por el campo, solía parar a comer en mí casa.

-¿Cuándo surge la invitación a sumarte a la Asociación Española?

Cuando mis hijas ya eran bastante grandecitas, Oliva Bayugar me invitó a la Sociedad Española, eso fue hace muchos años. Cuando volvió a renacer la Sociedad Española, se reconstruyó el teatro y había una subcomisión de damas que trabajábamos a full, con mucha alegría. Hasta hace poco seguí colaborando, y ahora no colaboro desde adentro, pero si desde afuera con lo que puedo, porque fue muy lindo para mí, tanto que en el año 2010 me dieron una distinción por haber formado parte. Era una armonía hermosa, trabajábamos, lavábamos los platos, no es como ahora.

Y desde ahí también nos conectamos con la Fiesta del Inmigrante, siempre fui coordinadora desde el momento en que se empezó a hacer la fiesta entre el Rotary y todas las colectividades. Me encantan esas fiestas.

Antes de que Rotary formara la fiesta, había reuniones de inmigrantes pero eran informales. Después se armó todo muy bien organizado, para mí era perfecto.

-¿Qué te dejó la experiencia?

Estoy muy agradecida porque pasé momentos muy lindos. A mí me parece que si no hubiera sido por el resurgimiento de la Sociedad Española, todo se hubiera perdido.

-¿En algún momento de su vida pudo visitar la tierra de sus padres?

No viajé a la tierra de mis padres y me arrepiento. Ahora que podría hacerlo no me animo, pero tengo contacto con familiares. La casa de mi papá todavía existe, está en poder de la familia. Tengo primos que han ido a visitarla.

Después que vino mi papá a la Argentina vinieron dos hermanos más de él, pero a su vez era una familia grande, entonces uno quedó con los padres en España y cuando murieron, le legaron lo que tenían para que quedara para ese hermano.

-¿Tu papá después que vino a Argentina volvió a ir a España?

Mi papá no volvió a España. En esa época era muy distinto, primero el tema económico no lo hacía posible y además no era costumbre como ahora que se viaja tanto. En la época de la guerra le mandaban a la familia comida porque era una miseria lo que pasaban. Mis padres fueron muy agradecidos de Argentina, la pasaron mejor que en España. Mi papá se llamaba Luis Menéndez y mi mamá María Fernández.

-En cuanto a las costumbres españolas, ¿Qué comidas haces en tu casa? ¿Qué música te gusta?

Hago de todo un poco y además me gusta la música española. Mi mamá era muy bailarina, bailaba la jota en las romerías, el paso doble, pero mi papá se argentinizó más que ella.

-¿Qué expectativas tiene sobre una nueva edición de la Fiesta del Inmigrante?

La cantina será un éxito como siempre, es un evento muy lindo porque es rememorar lo de todas las colectividades, es muy alegre. Voy a probar las comidas. Este año  los españoles elaborarán paella de cerdo, nunca lo comí, pero la voy a probar.

-¿Cómo está conformada tu familia?

Tengo tres hijas, Beatriz, Graciela y Ana Adela, ésta última también colabora con la Sociedad Española. Ellas ayudan en lo que pueden porque trabajan un montón ahora, corren de acá para allá, pero colaboran para conservar un poco las raíces.

Una de mis nietas se presentó para reina, Lucia Guarco, pero fue hace muchos años, todo por la abuela (risas), pero recuerdo que tomaba clases de baile español también.

EN POCAS PALABRAS:

Nombre completo: María del Pilar Menéndez

Fecha de nacimiento: 24/ nov/1931

Edad: 87 años

Colectividad: Española

Lugar de nacimiento: Buenos Aires

Familia: Tres hijas y once nietos

Un color: Rojo

Una comida: Asado