Ángel Wilt junto a su esposa Marcela  y a uno de sus hijos, desde hace algunos meses decidieron trasladarse hacia la localidad turística de Merlo,  en la provincia de San Luis,  donde comenzaron a incursionar en un emprendimiento de elaboración de alfajores artesanales, el cual por la cuarentena, se vio resentido. Eso los llevó a reinventarse y a buscar otra alternativa laboral y es por ello, que se volcaron a la cría de gallinas ponedoras y a la venta de huevos, a la producción y venta de cactus y suculentas y a la cría de cabritos.

Parte de los integrantes de la familia Wilt, desde hace algún tiempo decidieron emprender un nuevo desafío y es por ello que decidieron mudarse a la provincia de San Luis e instalarse en la ciudad de Merlo, donde en aquella localidad turística comenzaron a incursionar en un nuevo rubro laboral como fue la elaboración de alfajores artesanales, con lo que les iba muy bien hasta que dio inicio la cuarentena por coronavirus. A partir de ese momento, el turismo se vio resentido por la pandemia y por ende cayó drásticamente la demanda de alfajores, por lo cual la familia pringlense, decidió emprender otro proyecto con la cría de gallinas ponedoras y la venta de huevos. Para ello adquirieron varios ejemplares y se encuentran trabajando con intenciones de ampliar desde agosto el número de las mismas  para aumentar la producción. A su vez, también están incursionando en la cría de cabritos para elaborar quesos y también producen y venden cactus y suculentas, entre otras actividades que llevan adelante para poder mantenerse. Justamente consumen verduras de su huerta y otros productos que elaboran como forma de auto sustentamiento. También durante esta cuarentena, Ángel y Marcela fueron abuelos por parte de su otro hijo, que se quedó en nuestra localidad y esperan ansiosos a que se reabran las rutas para poder viajar y conocer a su nieta Sofia. Es por ello, que en la entrevista de "Perfiles" de El Diario de Pringles" de este domingo, conoceremos todo lo referido a los proyectos que está llevando adelante esta familia de nuestra ciudad en la provincia de San Luis.    

-¿Cómo surgió la posibilidad  de trasladarse a otra provincia para comenzar con una nueva actividad laboral? 

Fue un cambio necesario, acá encontramos un lugar que trasmite mucha paz, tranquilidad, hago 10 mil cosas a la vez, soy medio desordenado, pero mi señora y mi hijo, son los que me van acomodando para que podeamos hacer cosas juntos y de esta manera, vamos saliendo adelante. Siempre fuimos de emprender proyectos en familia, en su momento tuvimos la pensión Lafaille en Pringles, donde habíamos comenzado a hacer huerta en el patio de la misma y hemos hecho de todo en esta vida, desde vender rifas, a tener un programa radial con anuncios clasificados, que fue de los primeros que hubo en Pringles, en fin, en la vida hay que hacer de todo, mientras tengamos salud, que es lo que importa, después estamos abiertos a hacer lo que sea para subsistir.  

-¿Cómo se llaman los alfajores artesanales que elaboran?

Los alfajores se llaman Mora Merlina, por una perrita que tenemos que se llama Mora, y Merlina por Merlo, el lugar donde vivimos. Se venía trabajando  muy bien, fue muy cortito el plazo desde que nos dieron la habilitación, hasta que dio inicio la pandemia.

-¿Y cómo surgió la idea de elaborarlos y en qué receta se basaron?

Fuimos buscando información por todas partes, en internet, en youtube, en fábricas y pymes y así fuimos aprendiendo bastante hasta que lo perfeccionamos y nos largamos a elaborar. Hacemos de fruta, dulce de leche, blanco y negro.  

-¿Cómo surgió la posibilidad de la cría de gallinas ponedoras’ 

Arrancamos con 250 ponedoras, que ponen 110 huevos más o menos por día, en verano ponen todos los días todas, aunque es muy buen promedio, se les da alimento balanceado y mi hijo prepara también maíz con un poquito de avena o trigo.  Estas ponedoras ponen huevos  marrones, ya que no producimos huevos blancos.  Las gallinas son las de doble propósito,  del INTA,  una negras que sirven, tanto para huevo como para carne, pero nosotros las tenemos solo para huevos. 

-¿Cómo es el cuidado que requieren las gallinas?

Cuando las gallinas ponedoras ya están grandes, se les da alimento balanceado, unos 200 gramos por cada una y también se les da verdura como lechugas y acelga que les gusta mucho y también un alimento que acá se le llama changúa, que es maíz picado. De este último no le damos mucho porque la gallina ponedora necesita del alimento balanceado más que nada para que  caliente el cuerpo y así pueda  poner huevos todos los días, porque si no les das alimento balanceado, no ponen.  Las criamos de chiquitas 

-¿También crían pollos bebés?

Estamos criando pollitos doble pechuga, que los tenemos en cajas, con luz, en una habitación cerrada para que estén calentitos. Le damos alimento balanceado bien picado específico para los pollos bebés y cuando están grandes, se los pasa a los respectivos gallineros. 

-¿Para ustedes representa una alternativa ante la caída de la producción de los alfajores artesanales?

No es una alternativa, simplemente estamos trabajando de ésto, y ahora encargamos para el mes de agosto más ponedoras, una cantidad importante,  y también de pollos doble pechuga, para arrancar en el verano con grandes cantidades de venta de huevo.  Se está vendiendo en los comercios, por suerte no te piden muchos requisitos, te dejan  trabajar, no tenés que pagar Monotributo, para arrancar.  Lo mismo nos sucedió en su momento con los alfajores, me dieron una mano tremenda, para que arranque a elaborar  alfajores y venderlos, me dieron un rótulo, un rnpa,  para que pueda  producirlos y venderlos en los comercios.  Con eso estamos parados ahora, porque con el tema de la cuarentena, no hay turismo y no se puede vender. Cuando se normalice todo eso, vamos a volver con la fábrica de alfajores. 

-¿También tienen pensado incursionar con la huerta y en otros rubros?

Con mi hijo, el más chico, vamos a dedicarnos a todo lo que es huerta, cría de animales, tenemos el proyecto de los cabritos también, y Marcela va a encarar ella sola el tema de los alfajores. Estamos próximos a mudarnos, saliendo del límite de Merlo,  pasando para el lado de Córdoba, porque conseguimos una chacra, y podemos hacer huerta, invernáculo, a medida que vayamos generando ingresos.  Todo lo que producimos  lo vamos a vender acá. También tenemos muchas plantas, ahora más que nada, nos estamos dedicando a eso también. Yo me dedico a todo lo que es cactus, suculentas, acá la gente compra muchísimo todo lo que se produce, ya sean plantines, plantas, huevos, pollos de campo, plantas aromáticas, todo lo que producís, lo vendés, la gente te ayuda y consume mucho lo natural.  

-En definitiva ¿Están vendiendo de todo un poco?

Plantas tenemos un montón,  vamos rescatando, vendemos algunos huevos, pollos,  algunas plantitas, plantines de huerta, entonces entre todo, vamos generando una buena entrada. También vamos a buscar leña de algarrobo, para vender en bolsitas, y de esta manera, vamos subsistiendo. 

-¿También tenían pensado criar cabritos?

Tenemos la idea de reproducir algunos, pero no para consumirlos, simplemente  nuestra idea es hacer quesos de cabra y consumir la leche, porque no nos gusta matarlos. 

-¿Pero el fuerte de ustedes por el momento tiene que ver con la cría de pollos?

Recién estamos arrancando con una mini pyme, tenemos   250 ponedoras, la idea es llega a 2 mil, hacer un gallinero súper grande y prácticamente vivir de eso. 

-¿Extrañan mucho a sus seres queridos que quedaron en Pringles? 

Se extraña mucho a los familiares y a la ciudad de Coronel Pringles. Tampoco se puede viajar en estos momentos, así que nos comunicamos por WhatsApp y por videollamadas. Hace poquito nació nuestra primer nieta y no pudimos estar en el parto,   estamos sufriendo porque no podemos verla, es muy duro, pero tratamos de aguantar y ni bien tengamos la posibilidad, viajaremos a conocerla. 

-¿Cómo se lleva allá el día a día con la cuarentena? 

Estamos peleándola, vamos consumiendo muchas cosas que producimos, hacemos dulces, pollos en escabeche, verduras, hacemos el puré de tomate, estamos auto sustentándonos, entonces abaratamos un montón de costos, porque a veces hay faltantes de productos y muchos alimentos han aumentado sus precios.