Facundo Quiroga y un merecido homenaje a Elsa Juárez
UNA MUJER QUE DEJÓ HUELLAS
El reconocido payador pringlense escribió un poema especial en honor a esta ciudadana que falleció hace casi dos años y dejó una huella imborrable en todos los artistas que visitaron nuestra ciudad y que ella recibió en su casa con la calidez que la caracterizaba.
El reconocido payador pringlense, Facundo Quiroga, que habitualmente recorre diversos escenarios en el país en diferentes eventos tradicionalistas, en tiempo de cuarentena, se inspiró y escribió un poema en homenaje a la recordada Elsa Juárez.
Ubicado en un campo de La Madrid, la musa inspiradora y una fecha especial, dieron vida a este escrito especial. "Elsa fue muy amiga de mi madre. Al fallecer mamá Elsita ocupó ese lugar y me cuidó y fue mi segunda madre en toda la adolescencia y lo seguirá siendo por siempre", manifestó Facundo Quiroga a "El Diario de Pringles".
Contó que este poema "lo escribí el 25 de mayo que fue el día de su cumpleaños y en forma de recuerdo y saludo, escribí esas décimas en asonancia. La escribí el mismo 25 a la una de la mañana", recordó.
Y subrayó, "Elsa se ganó el respeto y el cariño de todo aquel artista que pasó por su casa y fue un poco la madre de todos. Era un ser de otra galaxia", remarcó.
Facundo contó que se van a cumplir 2 años del fallecimiento de Elsa en octubre próximo.
A la par, el payador comentó que antes de la cuarentena tenía todo programado para viajar a Uruguay, tenía todo el año cubierto, pero se cortó todo por el inicio del aislamiento social, preventivo y obligatorio, para detener el avance del Covid-19. "Le pediría a la comunidad que se cuide y cuide al prójimo. Dicen que "después de las tormentas, sale el sol", expresó.
TE EXTRAÑO Y TE RECUERDO
Hoy en este veinticinco
me trajo tu voz el viento.
El perfume de tus manos
y esa palabra te quiero
por más que quiso el destino
llevarte de mí muy lejos,
aunque sé que estás cerca
cada vez que miro el cielo,
te imagino en una nube
o en el sol con sus destellos.
Extraño tomar tus mates,
acariciar tus cabellos
y poder volverme niño
y darte en la frente un beso,
pero no estás físicamente,
aunque te tengo aquí adentro
y sé que en lo espiritual
vivirás en mi recuerdo,
por los siglos de los siglos
y los tiempos de los tiempos.
No creas que me olvidé
la razón por que te pienso,
hoy es día de tu santo
ya ves de que lo recuerdo,
sos mi madre de crianza
hada madrina en mis sueños,
cómplice de mis locuras
y hondo latido en mi pecho,
feliz cumpleaños viejita,
te digo mirando al cielo.
Facundo Quiroga