Vicky Lucero es Instructora oficial de Zumba y  de reguetón, y Profesora de Ritmos Caribeños y pasó de dar clases 12 horas por semana, antes de la cuarentena, a quedarse sin trabajo, una vez que inició la misma. Con el tiempo se aggiornó a la tecnología y hoy dicta clases virtuales y se capacita a través de internet y según aseguró, cuando regrese con las clases presenciales, también va a seguir con el dictado de las mismas a través de diferentes plataformas virtuales.  

Muchos trabajadores debieron reinventarse o aggiornarse a las nuevas tecnologías una vez que dio inicio la cuarentena por COVID-19 y uno de esos casos, es el de la Instructora de Zumba Vicky Lucero, quien se encuentra con una difícil situación, a la cual la pudo sortear de la mejor manera que sabe hacerlo, bailando.  "En mi caso había comenzado con las clases en el mes de febrero, dictando en el Club Independiente como en la Asociación Española y trabajé hasta el 17 de marzo y una vez que dio inicio la cuarentena, las clases se suspendieron como sucedió con la mayoría de las actividades.  Tenía unas 12 horas semanales y de golpe me encontré con un  panorama desalentador, donde se me habían interrumpido mis ingresos económicos.  Me agarró mucha desesperación como a muchos trabajadores que se encontraron de repente con esta situación y de ahí comencé a pensar hasta que un día armé un grupo online a través de Facebook. Si bien el baile, es mi trabajo, para mí bailar representa una parte muy importante en mi vida y no lo tomo como tal, es por ello que decidí formar un grupo privado al que se sumaron como 300 chicas y empecé a dictar clases en forma gratuita. Al principio grababa las clases por WhatstApp y las enviaba y después me tuve que ir aggiornando y empecé a realizar transmisiones en vivo y para lograr una comunicación más fluida con las alumnas, a través  del Face Live. Un día se acercó una alumna con un gesto hermoso, ya que entre varias habían reunido dinero y me mandaron el mismo como una manera de pagar una cuota mensual, lo que me sirvió de mucho, fue un alivio, sobre todo para solventar gastos, aunque lo que más me impactó fue la decisión que tomaron", explicó.

Fue así como desde el mes de mayo,  Vicky comenzó a dictar clases más personalizadas a través de las redes sociales, donde las alumnas abonan una cuota mucho más inferior a la que abonarían en una clase presencial y de esta manera esta trabajadora, se reinventó, aggiornándose a la tecnología para el dictado de sus clases, algo que perdurará más allá de la pandemia según aseguró, ya que una vez que pase todo ésto, va a seguir tanto con las clases presenciales como con la clases vía online. "Comencé en mayo después de consultarlo con las chicas, a cobrar una cuota menor a la que se cobra en los salones y con unas 50 chicas comenzamos a trabajar de esta manera y hasta  la actualidad lo sigo haciendo. Es una experiencia muy linda, tengo alumnas jóvenes y mayores de edad, e incluso a ellas les costó al principio poder hacer las videollamadas.  Las clases son de 50 minutos,  que es el tiempo que te permite la plataforma.  Los lunes y los viernes estoy dictando clases de zumba y el mes pasado sumé, que me estaban pidiendo mucho,  clases de bachata estilo femenino,  los días miércoles, donde las chicas siguen la coreografía que voy haciendo.  La semana pasada íbamos a comenzar de nuevo con las clases presenciales, ya que habíamos armado los protocolos y estaba todo listo para arrancar, pero luego de conocerse el caso positivo, quedó todo en suspenso nuevamente. En mi caso como trabajo en salones grandes, no hay mucho problema con el distanciamiento social, tenemos que hacer cuadrados de 2 x 2 metros para que las alumnas bailen en el mismo y mantengan el distanciamiento con sus compañeras.  Pero ahora esperaremos a que se habilite nuevamente la actividad, pero lo que  tengo claro, es que voy a seguir tanto con las clases presenciales, como con  las clases virtuales porque tengo alumnas de Felipe Solá, Mar de Ajó, Coronel Suárez y Lamadrid, entre otras, así que quiero seguir junto a ellas", declaró. 

Por último, la pringlense aseguró que durante esta cuarentena también aprovecha la posibilidades que han surgido para capacitarse con importantes referentes de baile vía virtual, así que de estar en una mala situación, le encontró la vuelta a este mal momento y ahora se encuentra, no sólo dictando clases y trabajando, sino que también capacitándose.