Así lo indicó el tapicero local Julio Giorgi, quien contó a "El Diario de Pringles", cómo se encuentra trabajando en la actualidad con esta actividad y a cómo ha atravesado lo que va de la cuarentena.  "Si lo comparamos con el mismo periodo del año pasado,  el trabajo disminuyó", expresó.  

Durante la actual cuarentena hemos ido reflejando la situación de los diferentes rubros de la ciudad, donde  comerciantes, y diversos trabajadores nos han ido contando cómo han atravesado la misma hasta la actualidad. Hoy es el turno de conocer la realidad de un tapicero de nuestro medio, quien en diálogo con "El Diario de Pringles", contó cómo  le ha ido con su actividad.  "Tuvimos la tapicería cerrada casi dos meses al principio de la cuarentena  y me dediqué  en este momento  a limpiar y ordenar todo el taller, ya que nunca te queda mucho tiempo para ésto, más allá que no había ingresos, ya que no podía trabajar. Una vez que pudimos abrir las puertas nuevamente, comenzaron a entrar diferentes trabajos. Igualmente si lo comparamos con el mismo periodo del año pasado, el trabajo disminuyó.  El invierno no es la época fuerte de la tapicería,  ya que acá se arranca con todo desde septiembre hasta febrero, pero por suerte van entrando cosas para hacer, afloja siempre para fines de mes, pero nos alcanza para ir sobrellevándola. La mayoría son trabajos chicos, nada grande, porque la gente cuida el dinero.  Además tengo varios trabajos que he terminado y que no los han retirado, en mi caso guardo las cosas, pero hay gente que hace mucho tiempo no retira los muebles y a mí me ocupa lugar, que realmente necesito para poder trabajar más cómodo", explicó Julio Giorgi.

Es así que también le consultamos al tapicero local, cuáles son los trabajos más comunes que le llevan a su local y si ha tenido problemas con el abastecimiento de materiales, a lo que respondió.  "La gente opta mucho por arreglar las cosas. En algunos casos compran nuevo, ya que con las tarjetas de crédito tienen varias cuotas para poder hacerlo y acá el trabajo cuanto mucho lo puedo dar a pagar en dos veces. Igualmente hay una gran diferentes entre comprar 6 sillas nuevas o hacerlas tapizar. Se nota que la gente últimamente opta por hacer arreglar las sillas, sillones, etc. También entran trabajos de reparación de tapizado de butacas de auto y generalmente los que vienen quieren que se hagan rápido los arreglos y así lo hacemos.  En lo que tiene que ver con materiales, no hemos tenido desabastecimiento, en un momento se complicó cuando los comisionistas no podían viajar a Bahía Blanca, pero una vez que pudieron hacerlo, ya nos pusimos al día y hoy si necesitamos algo de urgencia, lo mandamos a buscar y unas horas más tarde ya está en Pringles.  Lo que sí tratamos es de pedir un adelanto del pago del trabajo por anticipado al cliente para la compra de los materiales y mayormente no tienen problema en ese sentido y comprenden la situación. Vamos a seguir trabajando tranquilos, buscándole la vuelta para seguir trabajando todos los días hasta que mejore la situación", sentenció el trabajador. 

De esta forma conocimos también la realidad de un trabajador del rubro de la tapicería de nuestra localidad.